Nuestra historia comenzó hace 14 años, cuando una madre y sus dos hijas, unidas por su amor por las joyas, decidieron emprender un camino juntas. Un camino que, como la vida misma, fue cambiando, transformándose y entrecruzándose, hasta dar origen a lo que hoy somos: Entrecruces.
Desde el principio, nuestro sueño fue crear piezas que no solo sigan las últimas tendencias, sino que también hablen de calidad, de identidad y de algo que perdure. Nos mueve el desafío constante de combinar materiales duraderos con precios accesibles, sin dejar de ser fieles a nuestro estilo.
Creemos que cada pieza de joyería es mucho más que un accesorio: es una forma de expresión, una historia que se lleva puesta. Por eso, seguimos muy de cerca las tendencias del mundo, pero siempre desde nuestra mirada. Este año dimos un paso enorme: llegamos a Argentina, un país lleno de energía, arte y creatividad. Nos emociona crecer acá, y seguir construyendo esta historia con personas que valoran lo auténtico.
Amamos lo que hacemos con todo el corazón. Para nosotras, Entrecruces no es solo una marca de semijoyas; es un proyecto de vida que compartimos con ustedes, con cada diseño, cada detalle y cada paso que damos.
Gracias por ser parte de este viaje.
